El alcalde de la municipalidad distrital de La Matanza en Perú, profesor Juan Alvarado Reyes, ha inaugurado el comienzo de las obras de instalación del sistema de bombeo fotovoltaico que dará agua potable a Cucur, gracias al proyecto desarrollado por Energía sin fronteras. Esta fase se inicia después de la limpieza y desarenado del pozo y tras el dimensionamiento de los equipos y la adjudicación de los trabajos correspondientes. Se espera que la instalación esté disponible en cuatro meses y sirva para que esta población vea reforzado su derecho al agua potable y a disfrutar de unas condiciones sanitarias y económicas mejores.
La captación y abastecimiento de agua potable en Cucur forma parte del programa de acceso al derecho al agua que Energía sin fronteras lleva implementando desde hace más de 10 años en la zona de La Matanza junto a su población y municipalidad. Cucur será la octava localidad que tenga acceso al agua potable mediante energía fotovoltaica, limpia y no contaminante. Esta iniciativa es consecuencia de la colaboración de las autoridades distritales, Esf y el socio local Mirhas.
El proyecto parte del aprovechamiento y puesta en funcionamiento de un antiguo pozo de accionamiento manual al que se le incorporó una instalación de bombeo accionado por energía eléctrica de origen solar, así como de un depósito de almacenamiento y potabilización del agua bombeada para su uso por la población en higiene, alimentación y explotaciones agropecuarias. Se espera poder disponer de un caudal de 20 m3 diarios. El proyecto incluye un curso de capacitación teórico y práctico para los operadores del sistema fotovoltaico y está previsto que la municipalidad de La Matanza realice cursos productivos con las mujeres de Cucur, mejorando así sus oportunidades de futuro. En total, unas 250 personas de esta localidad se beneficiarán de las nuevas instalaciones.
El éxito del proyecto tendrá impactos positivos sobre diversos ODS. Junto a la mejora de las condiciones sanitarias e higiénicas de la población, se dispondrá de mayores caudales de agua para aumentar la producción agrícola y ganadera. Se espera que la calidad de vida de las niñas y las mujeres mejore sustancialmente al no tener que desplazarse a otras localidades a por agua. Según datos de ONU, las mujeres y las niñas son las encargadas de recolectar agua en el 80% de los hogares sin acceso a agua corriente.