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Mi libro. La anomalía, de Hervé Le Tellier

                                                                                                                     Por Lucía García

Estrenamos esta sección cultural hablando de libros y mi elección inaugural es La anomalía, de Hervé Le Tellier (París, 1957), Premio Goncourt 2020.

La anomalía sucede el 10 de marzo de 2021, cuando los doscientos cuarenta y tres pasajeros de un avión procedente de Paris aterrizan en Nueva York después de pasar por una terrible tormenta. Ya en tierra, cada uno sigue con su vida y tres meses más tarde, un avión idéntico, con los mismos pasajeros y el mismo equipo a bordo, aparece en el cielo de Nueva York. Nadie se explica este increíble fenómeno que va a desatar una crisis política, mediática y científica sin precedentes en la que cada uno de los pasajeros acabará encontrándose cara a cara con una versión distinta de sí mismo. Hervé Le Tellier firma una novela brillante en la que la lógica se funde con lo imposible.

Matemático de profesión y escritor de vocación, Le Tellier preside actualmente un taller creativo fundado en el París de los 60 llamado OULIPO (Ouvroir de Littérature Potentielle). Este taller juega con códigos narrativos altamente sofisticados y nunca hace literatura de consumo.

La anomalía trata del escurridizo tema del doble, presente ya en los mitos clásicos. Le Tellier le da varias vueltas y nos mete en un laberinto de complicada salida. Lo virtual y lo real se mezclan y confunden al lector que, al hilo de las diferentes tramas, se hace multitud de preguntas sin respuesta. Estamos ante nos una novela que integra varios géneros: crónica periodística, thriller, psicología, ciencia ficción…  Diría que son varios libros en uno, con distintos registros literarios, un sólido trasfondo científico y un importante bagaje humanístico. En esta sugerente distopía, Le Tellier toca además muchos temas de plena actualidad: racismo, política, religiones, homosexualidad, abusos, maltrato, parejas asimétricas…

La anomalía nos asoma a un mundo virtual que, de momento, nos supera. Pero ¿quién suponía hace unos años que íbamos a llevar con toda naturalidad un ordenador en el bolso? Le Tellier dice que se propuso “hacer viajar al lector en una aventura colectiva con muchos personajes en los que cada uno podría reconocerse… Cada vez está más claro que el Homo sapiens es más bien Homo fabulator. El ser humano es una fábrica de crear mitos hasta el punto de que es posible que exista un vínculo entre el desarrollo de nuestro cerebro y nuestra capacidad de crear mitos y transmitirlos. ¿Qué cambiaría si la realidad fuera una simulación? Una simulación no tiene por qué ser una predeterminación de todos nuestros actos sino un proceso vivo y caótico en el que cada uno de nosotros interactúa mientras la realidad avanza. Es increíble pensar que si vivimos realmente en una simulación, una novela como la mía es simulación escrita por un autor simulado y que los lectores que se plantean preguntas sobre la simulación nacieron también simulados. ¡Pero no cambia nada!”

Y aquí entra lo del transhumanismo, el metaverso, la realidad simulada y otros conceptos innovadores que empiezan a sonar con fuerza en todos los medios, dan mucho que pensar ¡y bastante vértigo!

La anomalía fue también una anomalía editorial. Nadie podía imaginar que vendería más de un millón de ejemplares, primera vez que un Premio Goncourt vende más el segundo año que el primero Por cierto, Le Tellier es el primer (y único hasta ahora) autor que recibe el prestigioso Premio Goncourt vía zoom. ¡Muy en la línea virtual que nos invade! En un tiempo de mucha pantalla y pocas lecturas, La anomalía triunfa porque propone cuestiones tentadoras para lectores de todas las edades y culturas. Espero haber acertado con esta primera propuesta de lectura y que os suméis al aplauso de sus muchos lectores.