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Programa de apoyo en energía para hogares vulnerables

La denominada pobreza energética es básicamente la dificultad que tienen muchas personas para afrontar los gastos energéticos del hogar como consecuencia, esencialmente, de unos ingresos insuficientes; todo ello agravado, en la mayoría de los casos, por una deficiente eficiencia energética de dichos hogares. El porcentaje de personas que se encuentra en dicha situación, en España, es difícil de estimar, pero lo que sí puede decirse es que supera el 10% de la población, o sea, unos 5 millones de personas y la situación ha ido empeorando. El último informe de indicadores de la Cátedra de Energía y Pobreza de Comillas establece el porcentaje de personas en situación de vulnerabilidad entre el 9 y el 17 por ciento.

Para tratar de ayudar a paliar esta situación, Energía sin fronteras se planteó en 2017 llevar a cabo una serie de acciones centradas en la atención a este colectivo. Para ello, Esf ha tenido que contactar con ayuntamientos y organizaciones asistenciales del tercer sector que asisten de manera ordinaria a dichas familias y, en colaboración con dichas instituciones, realizar las actividades necesarias.

Hasta la fecha se han llevado a cabo actividades con los ayuntamientos de Tres Cantos, Fuenlabrada y Coslada, así como con organizaciones del tercer sector como ECODES, Cáritas, asociaciones Libélula y San Ricardo Pampuri en Fuenlabrada, entre otros. Además, formamos parte del Consejo Asesor de la Cátedra de Energía y Pobreza de la Universidad Pontificia de Comillas. En Madrid estas actividades las lleva a cabo un grupo de voluntarios bajo la coordinación de Carlos González. También se están realizando acciones de este tipo en las sedes de Canarias y Andalucía.

El objetivo principal del programa es contribuir a la reducción de la pobreza energética en España. El objetivo específico es la asesoría, apoyo y colaboración con instituciones públicas o privadas, para que sean éstas quienes hagan la difusión / capacitación de las personas vulnerables. 

Este segundo objetivo tiene la ventaja de multiplicar los esfuerzos de Esf en formación y asesoramiento de usuarios finales vulnerables, siendo compatible -y recomendable- con la intervención directa de Esf con estos colectivos. Para este año 2024 la meta es formar y asesorar a 120 usuarios finales. Y también dar formación a voluntarios o profesionales de ayuntamientos u organizaciones que asisten a personas en situación de extrema vulnerabilidad.  

Teniendo en cuenta el objetivo estratégico de Esf de incrementar el impacto de todas sus actuaciones, debería priorizarse este resultado y diseñar una política activa de promoción y mejora de este tipo de actividades.

Además, queremos seguir contactando con asociaciones asistenciales como la ONG Rescate Internacional que da asistencia a refugiados. En las sedes territoriales de Andalucía y Canarias, se prevé seguir avanzando en los acuerdos con asociaciones como la Asociación El Buen Samaritano de Canarias.

Los talleres con usuarios finales han demostrado su utilidad y seguiremos con ellos hasta alcanzar la meta del programa: 45 talleres a final de 2026.

Por último, se realizan visitas a viviendas de personas que asisten a los talleres con el fin de hacer un estudio de su situación concreta y proponerles una serie de medidas de microeficiencia. En 2024 se han hecho 12 visitas, con sus correspondientes informes y recomendaciones.

 

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